Calendario escolar España 2025: Navidad, Semana Santa y verano

Planificar el año cuando tienes hijos en edad escolar, o cuando trabajas en un centro educativo, implica algo más que tachar días festivos en el móvil. Hay que cuadrar la conciliación, organizar campamentos, reservar viajes con meses de antelación y, de paso, evitar sorpresas con las recuperaciones de septiembre o los exámenes de evaluación. Por eso es conveniente comprender de qué forma se construyen los calendarios escolares en España, qué margen de alteración hay entre comunidades y qué fechas se consideran sólidas para 2025 en Navidad, Semana Santa y verano. Acá encontrarás una guía práctica, basada en de qué forma fijan fechas las consejerías y lo que cambia de un territorio a otro, con ejemplos y recomendaciones útiles.

Quién decide el calendario y por qué varía

En España, el Ministerio de Educación marca unas bases generales, pero la competencia de los calendarios escolares recae sobre las comunidades autónomas. Eso quiere decir que los días laborables mínimos, las vacaciones y los festivos autonómicos se combinan de forma distinta en todos y cada zona. Los ayuntamientos, además, suelen agregar un par de días no laborables locales, que se convierten en esos “puentes” que hacen danzar la agenda.

En la práctica, la mayoría de comunidades publican su calendario entre mayo y julio del curso anterior. Algunos detalles finos, como los días de libre disposición o posibles ajustes por festividades locales, se concretan un poco más tarde, a veces en el mes de septiembre. Por eso, cuando se busca un solo “calendario escolar España” para todo el país, conviene asumir que es un mapa general, una guía para orientarse, y que la confirmación definitiva llega con las resoluciones autonómicas y las circulares de cada instituto.

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Como regla de base, Primaria y Secundaria comparten las grandes vacaciones, aunque los periodos de exámenes y evaluaciones en ESO y Bachillerato pueden trastocar unos días al comienzo o al final. Capacitación Profesional y Universidad tienen su cadencia.

Los 3 grandes bloques de descanso en 2025

Si miramos el corazón del curso dos mil veinticuatro-dos mil veinticinco, hay tres bloques que concentran las “fechas vacaciones escolares” que interesan a las familias: Navidad, Semana Santa y verano. Incluyo los rangos más habituales, con notas sobre de qué manera se mueven en distintas zonas. No son promesas de mármol, mas sí referencias fiables para reservar con cabeza.

Navidad 2024-2025. del veintiuno-veintitres de diciembre a la vuelta de Reyes

La Navidad del curso dos mil veinticuatro-dos mil veinticinco comenzará, en la mayoría de comunidades, entre el viernes 20 por la tarde y el primer día de la semana veintitres de diciembre de 2024. En los institutos que cierran el trimestre el viernes 20, se considera ya no lectivo desde el sábado 21. En otros, el último día laborable cae el lunes veintitres con jornada matinal o actividades especiales. La vuelta casi siempre se fija tras Reyes, lo que en dos mil veinticinco significa volver el miércoles ocho de enero, ya que el seis es festivo nacional y el 7 puede ser lectivo o no lectivo según la comunidad.

En términos prácticos, lo más usual para Infantil, Primaria y ESO es el parón del 21 o veintitres de diciembre al 7 de enero incluidos, con reapertura el día ocho. Ciertas urbes con fuerte tradición de cabalgatas y actividades locales piden el siete como día no laborable, lo que estira la vuelta un día más. Si necesitas reservar vuelos, ese miércoles 8 es una apuesta razonablemente segura para el regreso a clase, salvo que tu municipio haya fijado un no lectivo.

Una anécdota útil: en centros con comedor externalizado, la compañía acostumbra a comunicar la operativa de esos últimos días de diciembre a inicios de mes. Si dependes de comedor, pide el aviso con cierta antelación, por el hecho de que el último servicio puede cerrarse el 20 si bien haya clase el 23 con jornada reducida.

Semana Santa dos mil veinticinco del 11 al 21 de abril según la comunidad

En 2025, Domingo de Ramos cae el 13 de abril y Domingo de Resurrección el 20 de abril. Eso coloca el Miércoles Beato el 16, Jueves Beato el diecisiete y Viernes Santo el 18. La mayor parte de consejerías establecen vacaciones escolares que empiezan como mínimo el fin de semana precedente a Jueves Santo, y se extienden hasta el primer día de la semana posterior a Resurrección si ese lunes es no laborable por pacto autonómico.

En términos de calendario escolar España, el patrón común que verás en los bocetos que circulan en primavera de dos mil veinticuatro y en las resoluciones de dos mil veinticinco es este: último día lectivo el viernes once de abril o el primer día de la semana catorce, reposo desde el 12 o quince y vuelta a clase entre el lunes 21 y el martes 22 de abril. Ciertas comunidades incluyen el lunes de Pascua como festivo autonómico, lo que empuja la vuelta al martes. Cataluña y la Comunidad Valenciana, por tradición, acostumbran a contemplarlo; en otras, el primer día de la semana es lectivo y la vuelta se fija el día veintiuno.

El detalle que más confunde a las familias es el encaje con las evaluaciones del segundo trimestre. Muchos institutos programan exámenes finales de evaluación en la semana anterior a Semana Santa, lo que hace que los días 10 y once de abril estén marcados por sesión matinal y actividades singulares. Si tienes hijos en Secundaria, asume esa semana como intensa y evita viajes desde el jueves 10 por la tarde, a menos que el centro haya cerrado notas con margen.

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Verano dos mil veinticinco cierres a partir del veinte de junio y regreso en la segunda semana de septiembre

El verano escolar 2025 trae menos dispersión de lo que semeja. En Infantil y Primaria, el curso termina en la mayoría de comunidades entre el veinte y el veinticinco de junio. En ESO el cierre se mueve en un abanico afín, con alteraciones por evaluaciones excepcionales. Bachillerato y FP pueden terminar antes por calendario de exámenes. El retorno suele fijarse en la segunda semana de septiembre, a menudo entre el 8 y el 12, con la Educación Secundaria iniciando unos días después que Primaria en algunas regiones.

El gran matiz es el calor. Varias comunidades en los últimos tiempos han adelantado el inicio de septiembre a la primera quincena con jornadas reducidas y protocolos de elevadas temperaturas. Eso proseguirá si las previsiones meteorológicas lo recomiendan. Conviene leer la circular de comienzo de curso del centro, que detalla si septiembre opera con jornada intensiva y sin comedor ampliado a lo largo de los primeros días.

Para familias que necesitan ajustar vacaciones laborales, una regla práctica funciona: reservar viajes hasta el veinticuatro o veinticinco de junio para Primaria y hasta el veintiseis para ESO es, generalmente, seguro. La vuelta en septiembre raras veces se sitúa ya antes del día 6, salvo en comunidades que optan por escalonar por niveles. Un instituto urbano con patio pequeño y sin sombra puede pedir medidas de adaptación, como horarios de entrada flexible, cuando la ola de calor aprieta, así que deja margen para los primeros días.

Cómo leer los calendarios escolares en España sin perderse en la letra pequeña

No todo está en la primera página del PDF de la consejería. Los calendarios escolares en España combinan días lectivos, festivos nacionales, autonómicos y locales, más los días de libre disposición. Ese coctel produce puentes que no aparecen a simple vista. Un ejemplo típico: si el 1 de mayo cae en jueves, múltiples ayuntamientos transforman el viernes dos en no laborable, con el beneplácito de la consejería y el consejo escolar municipal. Ese día no aparece como “vacación” en el cuadro autonómico, pero afecta a tu logística.

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Otra línea fina es la que aparta cierre de curso y servicios complementarios. Puede que el curso concluya un jueves, mas el comedor o las sendas escolares se ofrezcan solo hasta el miércoles por contrato. O que haya jornada de puertas abiertas para familias el último día, con salida una hora ya antes. Nada de esto es capricho, responde a conciliaciones de personal, licitaciones y normativas.

Y luego están los exámenes y recuperaciones en Secundaria. La evaluación extraordinaria, en comunidades que aún la fijan en el mes de junio o a principios de septiembre, mueve el calendario de ciertos alumnos. Si tu hijo cursa cuatro.º de ESO o 1.º de Bachillerato, verifica si las recuperaciones caen la última semana de junio o los primeros días de septiembre, pues condiciona viajes y campamentos.

Qué esperar por comunidades: patrones reales, no promesas

No hay atajos para tener certidumbres antes que la consejería publique su resolución. Aun así, la experiencia de años anteriores deja dibujar patrones:

    En Andalucía, Castilla-La Mácula y Extremadura, los cierres de junio acostumbran a encajar entre el veinte y el veinticinco, con vuelta a mediados de septiembre y vacaciones de Navidad del 23 de diciembre al 6 o 7 de enero. En Cataluña y Comunidad Valenciana, el primer día de la semana de Pascua se respeta como festivo, lo que desplaza la vuelta de Semana Santa al martes. Suelen empezar septiembre de forma escalonada por etapas. En la capital de España, el trimestre de Navidad acostumbra a cerrar en torno al veinte-23 de diciembre, con vuelta el 7 u 8 de enero conforme el año. Semana Santa prosigue el esquema clásico, y el verano para Primaria cae sobre el 21-veinticinco de junio. En el País Vasco y Navarra, la Semana de Pascua se configura de forma completa con el primer día de la semana incluido. El comienzo de curso en el mes de septiembre tiende a la segunda semana, con opciones de jornada continua en frente de partida conforme centros. En Galicia, Asturias y Cantabria, la vuelta tras Reyes suele ser inmediata y los cierres de junio aparecen en la franja 20-veinticuatro. La climatología pesa en la decisión de jornadas intensivas de septiembre y junio.

No son reglas recias, pero te orientan cuando equiparas vuelos o pides vacaciones.

Viajes y campamentos: reservar con cabeza evitando las trampas del calendario

Los mejores costes de transporte se logran con cierta antelación, eso no es ningún secreto. El truco está en medir el riesgo. Para Navidad 2024-dos mil veinticinco, si reservas de cara al regreso, escoge el 8 de enero como data de vuelta y, si puedes, adquiere con tarifa flexible por si tu ayuntamiento transforma el 7 en no laborable. Para Semana Santa dos mil veinticinco, evita salidas la tarde del 10 de abril si tus hijos están en Secundaria y agota la semana previa a exámenes. Para verano, bloquear entre el 26 de junio y el treinta y uno de agosto pocas veces choca con cierres de curso en Primaria.

Con campamentos urbanos, mira 3 cosas: horario real de septiembre, si incluyen comida con proveedores homologados y la política de cancelación por ola de calor. Los centros con gimnasios climatizados llenan plazas antes por el hecho de que resuelven el problema del mediodía. En pueblos pequeños, los monitores acostumbran a coordinarse con el ayuntamiento para ajustar horarios al bus escolar, un detalle que ahorra muchos madrugones.

Lo que cambia cuando hay elecciones, olas de calor o obras en el centro

Hay variables que pocos miran, pero que afectan a las familias. Años con elecciones locales o generales pueden introducir días de cierre del centro por uso electoral y limpieza posterior, que en ocasiones se compensan con un no lectivo ya previsto. En urbes con obras de envergadura en colegios, se adelantan las vacaciones veraniegas un par de días para facilitar trabajos de mantenimiento. Y las olas de calor han venido para quedarse: se activan protocolos que reducen el horario, suspenden educación física al aire libre y promueven https://pastelink.net/z5p26avw sombra y ventilación cruzada. Si trabajas a turnos, toma septiembre y junio como meses de reloj variable.

Un centro que conozco en Sevilla introdujo en dos mil veintitres un “plan sombra” que se aprecia en el calendario: las entradas se escalonan diez minutos y los recreos se mueven según la orientación del patio. Nada de esto altera las fechas en el papel, mas sí la rutina diaria. Es conveniente preguntar en tutorías de final de curso cómo piensan aterrizarlo en 2025.

Días clave del 2025 que interactúan con el calendario escolar

Los festivos nacionales del dos mil veinticinco marcan el marco. El 1 de enero y el seis de enero abren el año, con el retorno escolar tras Reyes. El 1 de mayo cae entre semana, así que muchos ayuntamientos intentarán un puente con un no laborable. El doce de octubre y el 1 de noviembre no tienen impacto directo en el curso 2024-dos mil veinticinco salvo por ser no laborables en el primer trimestre del 2025-dos mil veintiseis. El seis de diciembre suele generar un puente largo que coge a los pupilos en pleno final de trimestre, en ocasiones con exámenes de evaluación en Secundaria.

Para Semana Santa, la clave no es otra que el Viernes Santo del dieciocho de abril y el primer día de la semana de Pascua en comunidades que lo conservan. El quince de agosto es ya verano, sin alumnos en clase, mas afecta a la logística de campamentos y guarderías.

Cómo confirmar datas sin perder la mañana al teléfono

La verificación final se hace con tres documentos. Primero, la resolución del calendario de tu comunidad, que publica el boletín oficial autonómico. Segundo, la circular del centro, que fija horarios, jornadas reducidas y servicios complementarios. Tercero, el acuerdo municipal de días no laborables, que acostumbra a salir de los consejos escolares municipales y se publica en la web del municipio.

Si no quieres ir de web en web, marcha bien este orden:

    Guarda en marcadores la página de educación de tu comunidad y activa las alertas del boletín oficial para “calendario escolar”. Suscríbete al canal de WhatsApp o Telegram del colegio si lo tienen, suelen dar antes que nadie los cambios de jornada y servicios. Consulta el tablón del municipio para “días no lectivos” y confirma por correo, no por llamada, para que te responda alguien con el PDF adjunto.

Con ese triángulo, raras veces te llevas sorpresas. Y si además cruzas con el calendario laboral de tu empresa, podrás anticipar puentes potentes para escapadas sin tropiezos.

Pequeñas decisiones que mejoran mucho la conciliación

La experiencia dice que no todo va de fechas. Se trata de márgenes y de no sobrerreservar. Si dependes de abuelos para recogidas, marca en colorado la semana previa a vacaciones de Navidad y la semana artículo Semana Santa, porque hay festivales, tutorías y cambios de horario. Si tus hijos están en 6.º de Primaria o 1.º de ESO, la transición acostumbra a traer evaluaciones de diagnóstico en primavera, que ocupan mañanas enteras. En Bachillerato, mayo y junio son meses de prácticas y simulacros de EBAU, con asistencia obligatoria pero horarios especiales.

Y una recomendación que me ha ahorrado dolores de cabeza: deja un “día colchón” a la vuelta de cualquier viaje largo que coincida con regreso a clase. Si tu vuelo llega la noche del siete de enero y está lleno, los retrasos se propagan. Volver el día seis por la tarde es menos goloso de costo, mas te garantiza un 8 de enero con sueño normal y mochilas listas. En Semana Santa, eludir el domingo de Resurrección para el regreso acostumbra a rebajar media hora de atasco y el mal humor del lunes.

Dónde encajan los contenidos y aprendizaje entre tanto parón

Las vacaciones no son contrincantes del aprendizaje, mas parten el ritmo. En Infantil y primeros cursos de Primaria, Navidad se presta a reforzar rutinas básicas: lectura breve diaria, juegos que desarrollan psicomotricidad, manualidades que entrenan paciencia. En segundo y tercer ciclo, los profesores acostumbran a pautar tareas ligeras y lecturas. Lo prudente es reservar veinte minutos al día, no más, para no iniciar enero cuesta arriba.

En Secundaria, enero se estrena con repaso del bloque anterior y evaluación del segundo trimestre en el mes de marzo, justo antes de Semana Santa o la semana siguiente. Quienes administran bien marzo viajan en el mes de abril con tranquilidad. En verano, los cuadernillos han evolucionado y no son el castigo de otrora. Si tu hijo precisa recobrar hábito, julio marcha mejor que agosto. Las mañanas, además de esto, son más frescas.

Resumen útil para decidir reservas y organizar el año

Sin convertirlo en lista interminable, resulta conveniente precisar los cuatro anclajes fuertes del calendario escolar España 2025, los que casi no fallan:

    Navidad: reposo entre el 21 o 23 de diciembre de dos mil veinticuatro y el siete de enero de 2025, con vuelta en general el miércoles ocho. Semana Santa: corazón vacacional del doce-20 de abril de 2025, con Jueves diecisiete y Viernes 18 como festivos nacionales, y vuelta el 21 o veintidos según comunidad. Verano: final de curso en Primaria y ESO entre el veinte y el 25 de junio de dos mil veinticinco, regreso a clase entre el ocho y el doce de septiembre. Días locales: dos no laborables municipales que pueden crear puentes en febrero, marzo o mayo, según acuerdos.

Si precisas ajustar aún más, ve a la fuente: resolución autonómica y circular del centro. Los calendarios escolares en España tienen orquesta y director, pero cada colegio interpreta con matices. Comprender esos matices te ahorra dinero, tiempo y, sobre todo, discusiones la víspera de un examen.

Nota final sobre palabras clave que la gente busca y lo que realmente quiere saber

Cuando alguien teclea calendario escolar España o busca fechas vacaciones escolares, no piensa en folletines oficiales, sino en si puede alargar el puente de Semana Santa, en quién recoge a los niños el veintitres de diciembre o en si el primer día de la semana de Pascua toca madrugar. La mejor contestación combina visión general con detalles de tu municipio. Hazte un favor: configura un pequeño calendario compartido en tu móvil con cuatro capas, una para festivos nacionales, otra para tu comunidad, otra para el instituto y otra para la familia. En 5 minutos vas a tener un radar claro para 2025, sin depender de memorizarlas todas.

Y cuando llegue marzo y el conjunto de WhatsApp se pregunte si el veintiuno es laborable, abre tu calendario, respira y responde seguramente. Esa calma vale oro cuando el año gira cerca de un horario escolar.